Hoy he vuelto a sentir tu olor en mis entrañas, y eso que ya no me acuerdo a qué huelen tus suspiros. Las miradas que nos desnudaban se perdieron con tu silencio. Cada palabra que me regalaste ha ido callando lentamente, dejando sin voz a las caricias de tu sonrisa, de mi paciencia. Ese frío beso que me diste ha huído de mi paladar. A punto estuve de olvidar hasta tu nombre.
Tus pupilas clavadas en mis latidos me visitan constantemente, sin darme tiempo a cortarles las alas para que no me mordisqueen el corazón. La última noche en la que perdimos la inocencia abraza de vez en cuando mis sueños, intentando pasar desapercibida ante los guardianes de la luna. Tus labios durmieron mi conciencia en un descuido de la razón, y el único recuerdo que guardo de ti se fue pintando sobre un cielo rojo con lágrimas de ceniza. Perdimos el control del tiempo mientras una pequeña parte de nosotros ardía alrededor de nuestras manos entrelazadas. Tus ojos se ocultaron entre la nada, intentando dedicarme un hasta pronto, cuando sabía que un mañana nunca llegaría. Tal vez tú me mentiste, pero no lo hizo tu mirada. Jamás volví a susurrarle versos a tu corazón.
Han pasado demasiados meses, pero todavía me gusta volver a reencontrarme con tu olor muy de vez en cuando, aunque la mayoría de veces ni siquiera pueda reconocerlo.
5 comentarios:
Parece mentira que el olor pueda ser el más fuerte de todos los recuerdos...
¿Cómo? ¿Falas galego?
Precioso. Es increíble, yo puedo reconocer el olor de una persona, y más si esa persona es ESA persona. Me ha llamado mucho la atención el nombre de tu blog, creo que me pasaré de vez en cuando :)
Saludos
Cuan importante es el Olor de las personas que más cerca del corazon tienes, y lo dificil que es olvidarte de el cuando deciden irse. Me gusta mucho como escribes, te he añadido a mi lista de blogs en mi espacio Sigue asi.
Haces bello el desamor. Enhorabuena
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