martes, 22 de julio de 2008

Ríe

Le he hecho cosquillas al destino, y ha empezado a reír, dejando salir una dulce sonrisa que encadila mis deseos, rompiendo esquemas que hace días todavía dolían. Vendí la luna a la mañana y me escondo bajo tus suspiros. Dormí los sueños en primavera y por fin han despertado, dejando su caparazón en una carretera vacía, pintando un corazón en las vías del tren de medianoche.

1 comentario:

[..La chica triste que te hacía reír..] dijo...

Así que son cosquillas lo que hay que hacerle al destino para que nos sonría.
Tendré que ponerlo en práctica, a ver si nos sale mejor.